La homosexualidad se describe como el acercamiento o conducta sexual de una persona con sentimientos sexuales hacia personas de su mismo género. Según la terminología islámica, el comportamiento homosexual de los hombres (homosexualidad) se expresa con la palabra «livata», y el comportamiento homosexual de las mujeres (lesbianismo) se expresa con la palabra «sihak». Ambos actos homosexuales no se aprueban por la religión del Islam.
Según la religión del Islam, el sexo biológico da forma a la orientación sexual de una persona. Por esta razón, no hay otro género que no sean hombres y mujeres.[1] Sin embargo, el hermafroditismo (bisexualidad), que es la posesión congénita de órganos tanto masculinos como femeninos y aceptado como un trastorno estructural, es diferente de la homosexualidad. Las personas hermafroditas (bisexuales) pueden someterse a una cirugía para recuperar su identidad sexual. Los eruditos musulmanes no ven estas operaciones como una intervención en la naturaleza humana (su creación).
De acuerdo con la religión del Islam, la tendencia de una persona hacia una prohibición (haram) no es una excusa para cometer esa prohibición. Por lo tanto, la existencia de razones que conducen a la homosexualidad en una sociedad o entorno no requiere que esta prohibición se perciba como algo ordinario, ni es una excusa para cometer esta prohibición. También se debe tener en cuenta que la religión del Islam considera este pecado más feo que el adulterio (la unión de sexos opuestos fuera del matrimonio).
En muchas partes del Corán, el tema de la homosexualidad se ha mencionado específicamente para la tribu de Lut (as). Algunos de estos versos son: «Y Luṭ, cuando dijo a su gente: ¿Estáis cometiendo la indecencia que nadie antes en los mundos ha cometido? ¿Vais a los hombres con deseo, en vez de a las mujeres? Realmente sois una gente desmesurada.[2] «Y a Luṭ le dimos juicio y conocimiento; y lo salvamos de la ciudad que cometía las obscenidades. Realmente era gente de mal que se había salido de la obediencia«.[3] «Y Luṭ, cuando le dijo a su gente: ¿Os entregáis a la aberración a pesar de que lo veis? ¿Cómo es que buscáis con deseo carnal a los hombres en vez de a las mujeres? Realmente sois un pueblo de ignorantes.[4] «Y Luṭ, cuando dijo a su gente: Estáis cometiendo una indecencia que ninguna criatura ha cometido antes».[5]
Como se observa en los versos, la homosexualidad se describe como repugnante, mal comportamiento seductivo, feo comportamiento, una elección que hace que uno ignore los valores morales y la indecencia. Un comportamiento declarado inapropiado por Allah no se percibe como simpático o normal por un musulmán.
En la terminología islámica, las personas transgénero (personas que se sienten incómodas con su sexo biológico y que se sienten del sexo opuesto a su sexo biológico) se definen con el concepto de ‘muhannes’. El comportamiento del profeta Mahoma (La paz sea con él) hacia ‘muhannes’ para los musulmanes quedó claro con los siguientes sucesos: Fajita, uno de los parientes del profeta Mahoma (La paz sea con él), tenía dos esclavos liberados que eran muhannes: ‘Hit y Mati’. Mientras que el profeta Mahoma (La paz sea con él) pensaba que estos dos ‘muhannes’ no tenían nada que ver con la sexualidad, les permitía reunirse con su familia. Un día, escuchó su conversación, y cuando escuchó que estaban hablando de las partes de atracción sexual de una mujer, les prohibió que entraran a la casa y también los exilió de Medina. Cuando avisaron que pasarían hambre y morirían allí, los dejó regresar para coger comida los viernes. Estos dos ‘muhannes’ permanecieron en el exilio hasta el final del califato de Umar y luego pudieron regresar a Medina (se les permitió mezclarse con la gente).
Durante su tiempo, el profeta Mahoma (La paz sea con él) expulsó a otra persona de la ciudad que trataba de parecerse a las mujeres en términos de apariencia y estilo. Cuando los compañeros se ofrecieron a matar a esta persona, el profeta Mahoma (La paz sea con él) respondió: «Me está prohibido matar a los que rezan». Como se puede entender de estos dos hadices, el profeta Mahoma (La paz sea con él) no mató a las personas que no actuaron de acuerdo con su naturaleza sexual, pero les imponía el castigo del exilio. También afirmó que estas personas no abandonaban la religión al cometer este pecado.
Algunos de los hadices del profeta Mahoma (La paz sea con él) con respecto al pecado de la homosexualidad son los siguientes: «El que comete el acto abominable del pueblo de Lut es maldito». «Lo que más temo por mi ummah (que se hizo musulmana sin ver al profeta Mahoma (La paz sea con él) son las acciones de la gente de Lut». Como se puede entender de estos hadices, el pecado de la homosexualidad se encuentra entre los pecados que deben evitarse.
La religión del Islam fija el límite del velo entre sexos opuestos, y también establece el límite del velo entre los mismos sexos. El límite del hiyab de mujeres y hombres está entre el ombligo y la rodilla. Está prohibido (haram) que las mujeres y los hombres vean las partes de sus semejantes que se encuentran entre estos límites.
Como se puede ver, está prohibido que las mujeres traten de parecerse a los hombres y que los hombres se parezcan a las mujeres en su forma de vestir, hablar y comportarse en el Islam. El Islam no permite que una persona tenga una relación sexual con alguien del sexo opuesto sin casarse, ni le permite estar junto a alguien del mismo sexo. Si una persona tiene tendencia a la homosexualidad, se han recomendado ciertas formas para desviar este sentimiento para no sentir más este sentimiento. Estos son ayunar, recordar la muerte, leer el Corán o el dhikr, recordar abundantemente a Allah.
[1] «¡Hombres! Os hemos creado a partir de un varón y de una hembra.» Sura de los Aposentosprivados, verso 13; “¿E hizo a partir de él a la pareja: varón y hembra?” Sura del Levantamiento, verso 39; “Y Allah os creó a partir de tierra y luego a partir de una gota de esperma haciéndoos después en parejas.” Sura de Fatır, verso 11; » Y creó a la pareja: macho y hembra de una gota de esperma eyaculada». Sura del Astro, versos 45 y 46; «¡Hombres! Temed a vuestro Señor que os creó a partir de un solo ser, creando de él a su pareja y generando a partir de ambos muchos hombres y mujeres… «Sura de las Mujeres, verso 1.
[2] Sura Al A’raf, versos entre 80 y 84.
[3] Sura de los Profetas, verso 74.
[4] Sura de las Hormigas, versos 54 y 55.
[5] Sura de la Araña, verso 28.